La Ley 27/2013, de 27 de diciembre, para la Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, modifica la actual Ley de Bases de Régimen Local. Y dice que “Excepcionalmente, cuando el Pleno de la Corporación Local no alcanzara, en una primera votación, la mayoría necesaria para la adopción de acuerdos prevista en esta Ley, la Junta de Gobierno Local tendrá competencia para aprobar: a) El presupuesto del ejercicio inmediato siguiente, siempre que previamente exista un presupuesto prorrogado.”

Esta es, ni más ni menos, la situación de Cuenca, donde existe un presupuesto de 2015, prorrogado de 2014. Situación que ya fue advertida por IU en una moción presentada en el mes de octubre. Y a pesar de haber logrado que se celebre un debate monográfico sobre presupuestos por primera vez, que ha quedado en nada.

Así, de la forma más antidemocrática posible, hurtando la autonomía de las corporaciones locales y desvirtuando la representación democrática de la ciudadanía conquense, cuya expresión es su Pleno municipal, se han aprobado estos presupuestos que cuentan con el rechazo de la mayoría de concejales y concejalas del Pleno.

Desde IU recuerdan que se trata de unos presupuestos donde el 20% del dinero se va en pagar a los bancosla amortización  y los intereses generados por la deuda de 70’7 millones de euros que todavía padecemos y que sería necesario auditar. Unos presupuestos que destinan a la inversión tan sólo un 2,5% del dinero. Y unos presupuestos que reducen el gasto en Intervención Social en 100.000 euros. En definitiva, unos presupuestos a gusto de la banca, que siempre gana.

La formación también lamenta el rechazo a sus enmiendas,
que planteaban la remunicipalización de servicios tales como la recogida de basuras, limpieza viaria o parques y jardines. Servicios que terminan su contrato este año y que pueden suponer un serio ahorro a las arcas municipales, como ocurre en otras ciudades.